Primera Comunión y Confirmación- Ropa y complementos para el gran día

Primera Comunión y Confirmación: Ropa y complementos para el gran día

Desde que se instituyó el sacramento de la primera comunión su celebración ha ido evolucionando hasta convertirse en la gran fiesta familiar que se conoce hoy en día. Por su parte la confirmación es un acto más bien íntimo, que se realiza en unión familiar.

Te comentamos lo que deben vestir los pequeños y los complementos ideales para estas celebraciones, aquí tienes unos ejemplos.

Etiqueta para la primera comunión

Realmente no existe tal etiqueta al momento de vestir a los pequeños para recibir a Jesús a través de la comunión. Es más bien un problema de moda y tradiciones, que se conjugan en ese momento tan especial y que se ha pasado a través de las generaciones. Aunque se imponga la sencillez por parte de la iglesia, la importancia que le imprimen los católicos hace que este momento se convierta en una celebración muy especial.

Tradición en los trajes para niños

Originalmente los niños usaban la misma ropa de domingo, la que empleaban para asistir a la iglesia. Por lo general durante la celebración, la iglesia le regalaba a los pequeños una cruz de madera que lucían en sus cuellos con un simple cordel.

A principios del siglo XX se adoptó el uso de un traje blanco que simbolizaba la inocencia infantil. Después de la Guerra Civil empezaron a popularizarse los trajes de gala militares y los marineros. Tradición que se mantiene hoy en día.

A pesar de esto, la modernidad se impone en muchas familias que optan por un traje más sencillo y convencional, con pantalón, camisa, chaqueta y corbata. También se imponen los chalecos combinados con los pantalones; o las americanas y pantalones. Los tonos azules siguen mandando, aunque también se rescatan los grises, verdes y marrones para honrar ese día tan especial.

Vestir a las niñas

La imaginación se destaca cuando vestir a las princesas de la casa se trata. Se imponen los clásicos vestidos de novia infantil, blancos y largos, con grandes vuelos que llenan de ilusión la celebración de las niñas. Aunque se ven cortes más modernos y sencillos cada año.

El corte princesa, o el corte imperio son clásicos para esta celebración. Además del blanco, el marfil y los tonos huesos, rosas o grises marcan la predilección.
Normalmente la nota de color la incluyen los accesorios del día, agregando chaquetitas cortas, grandes lazos al cuerpo, o hermosas cintas al cabello. Las coronas de flores y los tocados dan un toque romántico a la celebración.

Complementos para recibir a Jesús

Los trajes y vestidos de comunión no están completos si no agregas los accesorios indispensables para ese día:

  • Los guantes blancos marcan un estilo muy particular. Puede emplearse encaje en el caso de las niñas. Se llevan durante la ceremonia y forman parte de la sesión fotográfica.
  • El rosario, aunque pueden llevarlos puesto, también se acostumbra a que lo mantengan en las manos durante la ceremonia.
  • El crucifijo, rememorando las celebraciones de las comunión tradicionales, forma parte de la ceremonia. Pueden ser pequeñas piezas de madera, o joyas que pueden exhibirse sobre la ropa infantil.
  • Las tiaras o diademas, para resaltar sobre el peinado de las pequeñas. Se puede sustituir la joyería por detalles florales.

La confirmación: etiqueta para la ceremonia

El sacramento de la confirmación completa la obra iniciada en el bautismo, aceptando la palabra de Jesús como compromiso de fe. Aunque la ceremonia es menos festejada por los católicos y no reviste toda la celebración y organización de la primera comunión, guarda su detalle y protocolo.

Es una ceremonia más sencilla y familiar, de carácter íntimo y privado, donde se reafirma la fe recibida a través del bautismo y que nos celebra como cristianos.

Por lo general no se esperan mayores arreglos. Un traje oscuro en el caso de los niños y un vestido sencillo para las pequeñas, es suficiente. Normalmente un rosario en el cuello se emplea como único complemento.

También es común regalar alguna medalla religiosa, un crucifijo, o algún detalle similar, al culminar la celebración. Es común prepara tarjetas como recuerdo de la ocasión, o pequeños obsequios para repartir entre los familiares cercanos.